Persuasión de los días
miércoles, 8 de diciembre de 2010
Lo vi entrar y asumir su miseria; se deshizo en un millon de partes. Era todos y no era nadie, era repudio y era amor.
Era consciente de su estado y sin embargo soñaba con unicornios, era un pedazo más de mierda en el agujero.
1 comentario:
Byron Alaff
dijo...
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miércoles, diciembre 08, 2010 11:04:00 p. m.
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